Sumcocan
27.03.2007, 16:29
Turismo rural.
Se trata de un deporte nacional que antes se llamaba
"ir al pueblo".
La diferencia es que si vas a tu pueblo es gratis, y
si haces turismo rural vas a un pueblo que no es tuyo
y pagando una pasta.
Para hacer turismo rural no vale cualquier pueblo.
Tiene que ser un pueblo "con encanto". ¿Y qué es un
pueblo "con encanto"? Pues un pueblo que sale en una
guía de pueblos "con encanto". Si es que se cae por
su propio peso. A estos pueblos se suele llegar a
través de una carretera comarcal "con encanto", que es
una carretera con tantos baches y tantas curvas que
cuando llegas al pueblo estás encantado de bajarte.
Y cuando entras al bar intentas integrarte con los
vecinos.
-¡¡¡Buenos días, paisanos!!! ¿Qué es lo típico de
aquí?
Y el del bar piensa: "Pues aquí lo típico es que
vengan los gilipollas de la ciudad los fines de semana
a dejarse doscientas mil pesetas".
Lo siguiente es alojarse en una casa rural o "casa
con encanto", que es una casa adornada con muchas
vasijas y ristras de ajos en el techo, que no tiene ni
tele, ni radio, ni microondas. Eso sí, tiene unos
mosquitos
trompeteros que por la noche hacen más ruido que una
Derbi Coyote.
Luego te das cuenta de que los del pueblo viven en
unas casas que no tienen ningún encanto, pero tienen
jacuzzi, parabólica, Internet y portero automático.
Tu casa no tiene portero automático, pero tiene una
llave
que pesa medio kilo.
Otra ventaja que tiene hacer turismo rural es que
puedes elegir entre una casa vacía o vivir con los
dueños. Estupendo. Te vas de vacaciones y además de la
tuya tienes que aguantar una familia postiza. Que por
la noche tú quieres ver la película, ellos los
documentales, y te planteas:
"¿Quién manda más, yo que he pagado 600 EUR o este
señor que vive aquí?". Pues gana él, que tiene
garrote.
Y encima te dicen que tienes la "posibilidad de
integrarte en las labores del campo". Que quiere decir
que te despiertan a las cinco de la mañana para
ordeñar a una vaca. ¿No te jode? Es como si te vas a
una gasolinera y te tienes que poner tú la gasolina, o
como si vas a un McDonalds y tienes que recoger tú la
bandeja. O sea lo normal. Así que te levantas a las
cinco para ordeñar a las vacas. Que digo yo: ¿por qué
hay que ordeñar a las vacas tan temprano? Si la leche
está ahí. ¿No se pueden ordeñar después del aperitivo?
Yo creo que esto es fastidiar por fastidiar, porque a
la vaca le tiene que sentar como una patada en las
ubres que la despierten a las cinco de la mañana para
que le toque las tetas un extraño. Que la vaca te
> mira como diciendo: "Tío , si quieres leche vete a
la nevera y coge un tetra brick". Es que son ganas de
molestar.
>
Pero el "encanto" definitivo son las "actividades al
aire libre". Como cuando te ponen a hacer senderismo,
que es lo que habitualmente se llama andar, y
consiste, pues eso, en poner un pie delante de otro
hasta que no puedas más, mientras los del pueblo te
adelantan en un
todoterreno con aire acondicionado. Pero tú encantado.
Vas por el campo como abducido. Te vuelves bucólico y
todo te parece impresionante: ves una caca de vaca y
sueltas:
-Ummmmmh qué olor a pueblo. ¿A pueblo? A pueblo no,
huele a mierda.
Eso sí a mierda "con encanto".
Y todo, sea lo que sea, te sabe a gloria: en el mesón
te ponen dos huevos fritos con chorizo y tú:
- En tu ciudad no te comes tú estos huevos, ni estos
chorizos.
- Y le dices al camarero:
- Oiga ¿a qué este chorizo es de matanza?
- Pues casi, porque a punto estuvo de matarse en la
curva el del camión de Campofrío.
- De repente oyes unas campanadas y dices:
- ¡Ah!. ¡Qué paz!. No hay nada como el sonido de una
campana.
- Y el del bar te dice: "¡Pero si está grabado!. ¿No
ves el altavoz del campanario?"
- En ese momento te preguntas si los sonidos de las
gallinas y de los grillos no vendrán en un CD: "Rural
Mix2005", "Los 101 mayores éxitos campestres." De lo
único que estás seguro es de que los mosquitos
trompeteros son de verdad. Que pareces un Ferrero
Roché con varicela.
Yo creo que, de lunes a viernes, la gente de estos
pueblos vive como todo el mundo, pero el fin de semana
distribuyen por la carretera a unos tíos disfrazados
de pastores y cuando ven que se acerca un coche,
avisan a los del pueblo con el móvil:
- ¡ Eh, que vienen los del turismo rural !
Y cambian el cartel de "Viedeoclub" por el de
"Tasca", sueltan unos perros cojos por las calles y
sientan a la entrada del pueblo a dos abuelos haciendo
alpargatas, que luego te compras unas y te salen más
caras que unas Nike.
- En fin, yo creo que un montaje tan grande como éste
no puede ser obra de personas aisladas. Estoy seguro
de que están implicadas las autoridades.
Me imagino al alcalde:
- Queridos paisanos: este verano, para incrementar el
turismo, vamos a importar más mosquitos del Amazonas,
que el año pasado tuvieron mucho éxito. Y quiero ver a
todo el mundo con boina, nada de gorritas de Marlboro.
¡Y haced el favor de pintaros el entrecejo, que no
parecéis de pueblo!
Y las abuelas. Nada de top less en el río, que
espantáis a los mosquitos. Ah, y por cierto: Este año
no hace falta que nadie haga de
tonto del pueblo. ¡Con los que vienen de fuera ya
vale!. ¡Viva los kamakus! x5 x5
Se trata de un deporte nacional que antes se llamaba
"ir al pueblo".
La diferencia es que si vas a tu pueblo es gratis, y
si haces turismo rural vas a un pueblo que no es tuyo
y pagando una pasta.
Para hacer turismo rural no vale cualquier pueblo.
Tiene que ser un pueblo "con encanto". ¿Y qué es un
pueblo "con encanto"? Pues un pueblo que sale en una
guía de pueblos "con encanto". Si es que se cae por
su propio peso. A estos pueblos se suele llegar a
través de una carretera comarcal "con encanto", que es
una carretera con tantos baches y tantas curvas que
cuando llegas al pueblo estás encantado de bajarte.
Y cuando entras al bar intentas integrarte con los
vecinos.
-¡¡¡Buenos días, paisanos!!! ¿Qué es lo típico de
aquí?
Y el del bar piensa: "Pues aquí lo típico es que
vengan los gilipollas de la ciudad los fines de semana
a dejarse doscientas mil pesetas".
Lo siguiente es alojarse en una casa rural o "casa
con encanto", que es una casa adornada con muchas
vasijas y ristras de ajos en el techo, que no tiene ni
tele, ni radio, ni microondas. Eso sí, tiene unos
mosquitos
trompeteros que por la noche hacen más ruido que una
Derbi Coyote.
Luego te das cuenta de que los del pueblo viven en
unas casas que no tienen ningún encanto, pero tienen
jacuzzi, parabólica, Internet y portero automático.
Tu casa no tiene portero automático, pero tiene una
llave
que pesa medio kilo.
Otra ventaja que tiene hacer turismo rural es que
puedes elegir entre una casa vacía o vivir con los
dueños. Estupendo. Te vas de vacaciones y además de la
tuya tienes que aguantar una familia postiza. Que por
la noche tú quieres ver la película, ellos los
documentales, y te planteas:
"¿Quién manda más, yo que he pagado 600 EUR o este
señor que vive aquí?". Pues gana él, que tiene
garrote.
Y encima te dicen que tienes la "posibilidad de
integrarte en las labores del campo". Que quiere decir
que te despiertan a las cinco de la mañana para
ordeñar a una vaca. ¿No te jode? Es como si te vas a
una gasolinera y te tienes que poner tú la gasolina, o
como si vas a un McDonalds y tienes que recoger tú la
bandeja. O sea lo normal. Así que te levantas a las
cinco para ordeñar a las vacas. Que digo yo: ¿por qué
hay que ordeñar a las vacas tan temprano? Si la leche
está ahí. ¿No se pueden ordeñar después del aperitivo?
Yo creo que esto es fastidiar por fastidiar, porque a
la vaca le tiene que sentar como una patada en las
ubres que la despierten a las cinco de la mañana para
que le toque las tetas un extraño. Que la vaca te
> mira como diciendo: "Tío , si quieres leche vete a
la nevera y coge un tetra brick". Es que son ganas de
molestar.
>
Pero el "encanto" definitivo son las "actividades al
aire libre". Como cuando te ponen a hacer senderismo,
que es lo que habitualmente se llama andar, y
consiste, pues eso, en poner un pie delante de otro
hasta que no puedas más, mientras los del pueblo te
adelantan en un
todoterreno con aire acondicionado. Pero tú encantado.
Vas por el campo como abducido. Te vuelves bucólico y
todo te parece impresionante: ves una caca de vaca y
sueltas:
-Ummmmmh qué olor a pueblo. ¿A pueblo? A pueblo no,
huele a mierda.
Eso sí a mierda "con encanto".
Y todo, sea lo que sea, te sabe a gloria: en el mesón
te ponen dos huevos fritos con chorizo y tú:
- En tu ciudad no te comes tú estos huevos, ni estos
chorizos.
- Y le dices al camarero:
- Oiga ¿a qué este chorizo es de matanza?
- Pues casi, porque a punto estuvo de matarse en la
curva el del camión de Campofrío.
- De repente oyes unas campanadas y dices:
- ¡Ah!. ¡Qué paz!. No hay nada como el sonido de una
campana.
- Y el del bar te dice: "¡Pero si está grabado!. ¿No
ves el altavoz del campanario?"
- En ese momento te preguntas si los sonidos de las
gallinas y de los grillos no vendrán en un CD: "Rural
Mix2005", "Los 101 mayores éxitos campestres." De lo
único que estás seguro es de que los mosquitos
trompeteros son de verdad. Que pareces un Ferrero
Roché con varicela.
Yo creo que, de lunes a viernes, la gente de estos
pueblos vive como todo el mundo, pero el fin de semana
distribuyen por la carretera a unos tíos disfrazados
de pastores y cuando ven que se acerca un coche,
avisan a los del pueblo con el móvil:
- ¡ Eh, que vienen los del turismo rural !
Y cambian el cartel de "Viedeoclub" por el de
"Tasca", sueltan unos perros cojos por las calles y
sientan a la entrada del pueblo a dos abuelos haciendo
alpargatas, que luego te compras unas y te salen más
caras que unas Nike.
- En fin, yo creo que un montaje tan grande como éste
no puede ser obra de personas aisladas. Estoy seguro
de que están implicadas las autoridades.
Me imagino al alcalde:
- Queridos paisanos: este verano, para incrementar el
turismo, vamos a importar más mosquitos del Amazonas,
que el año pasado tuvieron mucho éxito. Y quiero ver a
todo el mundo con boina, nada de gorritas de Marlboro.
¡Y haced el favor de pintaros el entrecejo, que no
parecéis de pueblo!
Y las abuelas. Nada de top less en el río, que
espantáis a los mosquitos. Ah, y por cierto: Este año
no hace falta que nadie haga de
tonto del pueblo. ¡Con los que vienen de fuera ya
vale!. ¡Viva los kamakus! x5 x5